La empresa Aeroepoxy Composites Andalucía dedicada al diseño, fabricación y venta de piezas para el sector aeronáutico y ferroviario con fábrica en Linares, entró en septiembre en fase de liquidación.
Mientras tanto, los trabajadores se encuentran inmersos desde el pasado mes de diciembre en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), a la espera de un inversor que pueda salvar la actividad de la empresa.
El ERTE que estaba en vigor expiró el día 14 de septiembre por lo que actualmente los trabajadores están con permisos retribuidos, aunque llevan dos meses sin percibir sus nóminas.
En cuanto a las firmas que pueden estar interesadas en la adquisición de Aeroepoxy, se mantiene el optimismo y la expectativa, ya que la fase de liquidación admite la presentación de ofertas tanto por parte como por el conjunto de la actividad, de cara a su transmisión, previa autorización del juez del concurso.
La esperanza de la plantilla está puesta en la concurrencia de alguna empresa interesada en la adquisición de la unidad productiva en su conjunto, ya que de no ocurrir así se procedería a la venta definitiva de las naves y la subasta de la maquinaria como activos aislados, perdiéndose en ese caso los puestos de trabajo de la plantilla al completo, que intenta que el ERTE sea prorrogado hasta diciembre para ganar tiempo de cara a una solución definitiva.
La Junta de Andalucía colabora junto a los representantes sindicales y a los administradores concursales para la entrada de nuevos inversores que podrían estar vinculados al sector y por tanto, de existir interés, podrían hacerse cargo de la actividad que ya existe.