Duro Felguera tiene 48 horas para decidir si acepta la propuesta de la banca o si presenta el preconcurso de acreedores.
Los trabajadores de Duro Felguera, han convocado una concentración frente a la sede del grupo en el Parque Científico de Gijón, preocupados por el futuro de la empresa.
La compañía dispone de 48 horas para definir su estrategia a corto plazo. Debe decidir entre presentar el preconcurso de acreedores, o aceptar la propuesta de los bancos que incluye la reestructuración de la deuda así como la salida del presidente del Consejo de Administración, contra quien ahora pesa una querella de la Fiscalía Anticorrupción.
El plan de la banca incluye, por un lado, la ampliación hasta el 31 de enero del acuerdo de suspensión del cobro de los débitos y sus intereses, vigente desde el 4 de julio y que vence este mismo sábado; así como dar nuevos avales para facilitar nuevos contratos.
Esta propuesta de Banco Santander y su filial de leasing, CaixaBank, Banco Sabadell, Banco Popular, Bankia y BBVA, pretende ganar tiempo suficiente para diseñar una solución definitiva a través de la ampliación de capital, capitalización de la deuda y entrada de nuevos inversores.
El grupo industrial tiene hoy 350 millones de euros de deuda financiera bruta y 110 millones en caja, con lo que la deuda neta se sitúa en los 240 millones. Pero a esa cuantía se suman otros 500 millones procedentes de pagos de dividendos y recompra de acciones, entre otras operaciones, así como la compra del edificio de Madrid que costó 35 millones y la división de Núcleo por la que la empresa pagó 70 millones.
A ello se suman los impagos procedentes de proyectos en Argentina, Australia, India y Venezuela, donde hay litigios y arbitrajes pendientes de solución y que suman 492 millones de euros.
Dentro del plan de los bancos se incluye la entrada de socios inversores. Tras la retirada de Acciona del proceso de negociación, en la actualidad se han firmado acuerdos de confidencialidad con al menos cinco firmas interesadas y dos family offices.
La alternativa que tiene el Consejo de Administración de Duro Felguera al plan de los bancos, es abocar al grupo a un proceso concursal. El preconcurso de acreedores sería el primer paso a dar y consiste en presentar la solicitud de preconcurso en el juzgado de lo mercantil por insolvencia actual o inminente, de cara a alcanzar en un plazo máximo de 4 meses, un acuerdo con los acreedores para la refinanciación de la deuda de la compañía.
Así, el deudor tendría tres meses para lograr el acuerdo, y una vez finalizado ese periodo, si no prosperase la negociación, la empresa tendría otro mes para presentar al juzgado la solicitud de declaración de concurso.
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Mientras tanto, Duro Felguera cae en Bolsa hasta los 0,50 euros por acción, aunque finalmente cerró a 0,52, reduciendo el valor de mercado de la empresa a 74,88 millones de euros.