El grupo empresarial cántabro Horizon Family Company ha adquirido la unidad productiva de Conservas Fredo por un montante de 5,5 millones de euros.
La operación se realizará a través de la sociedad Cantabria Family Investment y se hará efectiva en un plazo máximo de 30 días.
En la oferta presentada, la única que fue oficializada ante el Juzgado Nº 1 de Santander, se incluye la compra de la unidad productiva, la asunción de los créditos contra la masa (se adeuda a la plantilla el salario de tres meses) y el pago de las deudas pendientes con la Seguridad Social y la Agencia Tributaria, así como un desembolso inicial de 1,1 millón de euros para renovar las instalaciones y la maquinaria y adquirir las materias primas necesarias para reanudar la actividad. Además, se garantiza el mantenimiento del puesto de trabajo del total de la plantilla (unos 50 trabajadores entre fijos y fijos discontinuos) durante dos años, si bien, de forma paralela se está tramitando un ERE para el total de la plantilla de unos 18 meses de duración, tiempo que, desde el comité de empresa, consideran suficiente para que la actividad de la empresa vuelva a estar 100% operativa.
Las previsiones de los nuevos gestores de Conservas Fredo pasan por retomar progresivamente la actividad de la compañía y sus niveles de ventas. En su plan de negocio inicial se planteaba un objetivo de facturación para 2020 de 5,5 millones de euros .
Conservas Fredo solicitó concurso de acreedores en marzo de 2017 con una deuda acumulada de alrededor de 15 millones de euros. En septiembre de ese mismo ejercicio paralizó su actividad y, finalmente, en diciembre solicitó la apertura de la fase de liquidación.
Con planta de producción en Laredo (Cantabria), Conservas Fredo se especializa en la producción de anchoas en aceite y salazón tanto con sus enseñas ‘Fredo’, ‘Elite’ y ‘Almar’.
Su catálogo se completaba con otras conservas a la venta con la marca ‘Lindamar’, y una gama de soluciones de comida ambiente (‘Delicias Fredo’). Esta actividad le reportó unos ingresos en 2015 de 5,7 millones de euros, de los cuales, el 16% procedió del exterior, de países como Israel, Líbano, Egipto o Corea.