¿Cómo saber si debo solicitar el concurso voluntario de mi empresa?

El administrador de una empresa que está experimentando dificultades financieras, debe evaluar cuidadosamente su situación y considerar si necesita solicitar el concurso voluntario de la empresa, ya que éste es uno de sus deberes legales.
Algunas señales que podrían indicar la necesidad de solicitar el concurso voluntario incluyen:

1- Incapacidad para pagar las deudas o compromisos adquiridos de la empresa:

Si la empresa no puede hacer frente a sus obligaciones, es una señal de que es necesario informarse sobre la eventual necesidad de reestructurar el conjunto de deudas o compromisos, de cara a valorar la mejor alternativa para garantizar la continuidad de la actividad, y proteger a los administradores de futuras responsabilidades. Cabe destacar que solicitar el concurso voluntario de la empresa es una de muchas herramientas disponibles en el marco del derecho concursal para empresas con dificultades.

2. Pérdida de ingresos significativa:

Si la empresa ha experimentado una pérdida significativa de ingresos debido a la disminución de las ventas, ya sea por la caída de la demanda, la competencia u otros factores, esto podría ser una señal de que necesitamos analizar nuestra viabilidad a corto y medio plazo.

3. Falta de liquidez:

Si la empresa no tiene suficiente tesorería para cubrir los gastos operativos, esto es una señal notable de que necesitamos asesoramiento concursal.

4. Demanda de los acreedores:

Si los acreedores de la empresa están iniciando la reclamación por vía judicial del pago de sus créditos, y la compañía deudora no puede cumplir con sus obligaciones financieras en tiempo y forma, esto será señal de que necesitamos asesoramiento concursal.

5. Pérdida de clientes:

Si la empresa ha perdido una cantidad significativa de clientes, o su facturación estaba concentrada en uno o varios clientes principales que han reducido o cancelado sus contratos, la empresa proveedora necesitará valorar la reestructuración de sus costes a fin de garantizar su continuidad hasta la recuperación del volumen de ventas.

Es importante tener en cuenta que cada situación es única y que la decisión de iniciar un proceso de reestructuración de deudas, negociación con acreedores, o solicitar el concurso voluntario, debe ser evaluada en función de las circunstancias específicas de la empresa.

Si tiene dudas o preguntas en relación a su situación particular, o si las señales anteriores encajan con sus circunstancias, es recomendable buscar asesoramiento legal y financiero profesional.